Conforme nos vamos acercando al sur, parece que África se hace más "civilizada", en el sentido de desarrollo, infraestructuras, transportes, funcionamiento del país, "normalidad". No sabemos si es la latitud, la historia, el colonialismo o qué, suponemos que Mozambique nos dará más pistas. En cualquier caso, ya lo intuíamos en Zambia, pero allí todavía encontramos grandes contrastes entre el campo y la ciudad; y Zimbabwe es un caso especial, gracias a Mugabe. Pero en Botswana se confirma, lo cual resulta genial para sus habitantes y en buena medida también para el ya baqueteado viajero que viene del norte. Pero esa civilización a los "cuenta-blogs" les roba esas situaciones tragicómicas africanas que tanta munición aportan para el anecdotario. De Botswana podemos relatar las maravillosas puestas de sol, los paisajes interminables, los estupendos parques en donde hemos visto montones de animales (elefantes -120.000-, cebras, hipopótamos, jirafas, ñus, algún que otro felino, avestruces, aves mil, etc.), pero son experiencias para verlas y vivirlas..., o para que las cuente alguien que sepa hacerlo sin dormir al lector.
Así que Botswana ha sido un éxito africano. Con unos 600.000km2 y sólo 1,64 millones de habitantes es un país despoblado, en el que el enorme desierto del Kalahari ocupa el 85% del territorio. Todo ello no ha impedido que esta sea la nación del mundo que más rápidamente ha crecido entre 1966 y 2005, convirtiéndose en un país relativamente rico, democrático y estable. Claro que también ayudó que encontraran diamantes al independizarse. Pero eso no es ni mucho menos garantía de crecimiento, sino a menudo lo contrario, como muestra el "mal holandés" (cuando los holandeses encontraron gas, les creo mas problemas que beneficios) o, más cerca, cualquier país africano rico en petróleo. Sin embargo, en Botswana tuvieron la suerte de tener buenos dirigentes desde su independencia (en plan anécdota, a su presidente se le ve de vez en cuando haciendo su propia compra en el súper), que invirtieron los beneficios de los diamantes en infraestructuras, educación y salud. (Merece la pena comentar que la educacion es gratuita, incluyendo la universidad; durante esta y segun nos explico un profesor, el Estado paga un salario completo al estudiante durante el primer anho y medio salario a partir de entonces. Tambien cubre estudios universitarios en el extranjero).
Lo malo es que se van a quedar sin diamantes (que suponen el 32% del PIB) dentro de pocos años y lo tienen complicado para diversificar. Turismo es una opción, y lo están haciendo a base de "altos precios, poco volumen".
También es cierto que a muchos "botswaneses" no les preocupa lo que le pase al país dentro de unos años: la esperanza de vida pasó de 49 años el día de su independencia a 70 años en los 90, pero en 2010 va a ser de ¡27 años!, gracias al HIV/AIDS. Por lo menos se lo han tomado en serio, el tratamiento con retrovirales es gratuito y su objetivo es cambiar la tendencia para 2016.
Pero bueno, al viaje. Entramos a Botswana por el norte, por Kasane. Cruce de fronteras en tiempo record, profesional y aséptico, sin necesidad de visado. Viva la civilización.
Kasane es un pueblo que casi no lo es, con un pequeño centro y casas desperdigadas. Pero está junto al río Chobe, una pasada de parque con infinidad de "bichos" (Rodríguez de la Fuente estaría orgulloso de mi docto lenguaje sobre el mundo animal), entre ellos nuestros primeros leones. Lo visitamos en jeep al amanecer y en bote al atardecer. Una gozada.
De Kasane a Gweta, para ver más bichos, pero no junto a un río sino en lo que es el mayor salar del mundo (nada que ver con el blanquísimo y mágico salar de Uyuni en Bolivia; el de Botswana es arenoso). Más bichos (ditto), entre ellos nuestras primeras avestruces (que no metieron la cabeza en la tierra sino que escaparon raudas y veloces) y los simpáticos suricatas.
El delta del Okavango
Érase una vez un gran río. Un buen día (un día geológico, de esos que duran un porrón de años) el río se dividió, formando el Zambeze (y las cataratas Victoria) y el Okavango. Con menos caudal, el Okavango ya no tenía la fuerza de antes para empujar el agua a través del árido Kalahari, así que, exhausto, muere en el delta de su nombre (el mayor delta interior del mundo, una joya de la naturaleza) y dejó de irrigar un enorme lago que, al secarse, creó el ya mencionado mayor salar del mundo. A pesar de no llegar al mar en una suerte de "fluvis interruptus" (perdón), el Okavango es el tercer río más largo de África.
Desde nuestra base en Maun hicimos una excursión en mokoro por el delta. El mokoro es un frágil esquife -que diría Asterix-, minúsculo e incómodo, en el que un lugareño a modo de gondolero te conduce hábilmente por los intricados y tranquilos canales del okavango, en un mar de nenúfares y aves. Desembarcas hecho una piltrafilla, pero con energía suficiente para darte una vuelta y ver, cómo no, más bichos: ñus (nuestros primeros), jirafas, elefantes, cebras, avestruces.
De Maun nos dirigimos a zonas más norteñas del delta, hacia Sepupa. Desde aquí se pueden visitar las colinas Tsodilo, en donde se disfruta de infinidad de pinturas rupestres de los San y, desde lo alto del monte "Padre" (con 1.395m uno de los mas altos de Botswana) de unas magníficas vistas sobre la planísima Botswana. Todo ello bajo un calor tórrido.
Y de Botswana al Caprivi Strip de Namibia. No se pierdan el siguiente capítulo de nuestra apasionante aventura... :-)
Un abrazo
De Maun nos dirigimos a zonas más norteñas del delta, hacia Sepupa. Desde aquí se pueden visitar las colinas Tsodilo, en donde se disfruta de infinidad de pinturas rupestres de los San y, desde lo alto del monte "Padre" (con 1.395m uno de los mas altos de Botswana) de unas magníficas vistas sobre la planísima Botswana. Todo ello bajo un calor tórrido.
Y de Botswana al Caprivi Strip de Namibia. No se pierdan el siguiente capítulo de nuestra apasionante aventura... :-)
Un abrazo
Hola! ayer fue Sto. Tomas y estuvimos recordando aquel talo del anho pasado... Solo desearos que paseis unas felices Navidades, en estas fechas siempre se echa de menos a los que no estan. Besitos.
ResponderEliminar¿Todavia por el Cardboard Box? ¿Habeis pasado las navidades en Windhoek? ¿No ibais a bajar a Cape Town?
ResponderEliminarSólo felicitaros el año nuevo desde la comodidad de casa. XD
Un brazo fellow travellers!
Kike
HOLA HUGO, SOY ROSALIA, ME HE ENTERADO DE TU AVENTURA Y LEO CON VERDADERA ENVIDIA TUS ODISEAS. ¡¡¡¡VAYA VIAJE¡¡¡
ResponderEliminarFELIZ AÑO PARA LOS DOS
UN ABRAZO. ROSALIA
Qué fotazas de animales!
ResponderEliminarDavid y Kajsa