Páginas

13 de abril de 2014

Muchas vueltas da la vida, las vueltas dan mucha vida

Hace ya una eternidad que volvimos de aquel periplo africano, sobre cuyas empresas y tribulaciones, como modernos Maqrolles, os relatábamos en las anteriores entradas de este blog. Desde que volvimos a mediados de 2010 hemos vivido un año y pico en Brasil, hemos disfrutado de nuestras familias y amigos en Donosti, hemos hecho algún que otro viaje aquí y allá y, en fin, hemos trabajado unas y, ejem, zanganeado otros.
Fahrradmanufaktur TX800: una caña de bici (esperamos)

Pero no hay vacuna que valga contra la enfermedad del viaje, el gusanillo estaba ahí dando la chapa, así que, impotentes ante el gusanillo y siguiendo la gran sabiduría que contiene el retruécano del título, nos vamos a dar una vuelta por esos mundos y, esta vez, en bici. Genial, ¿no?

Bueno, seguro que a la mayoría eso de recorrer el mundo en bici, sufriendo las inclemencias del tiempo, subiendo cuestas un día sí y otro también, con las posaderas hechas un ecce hommo, durmiendo más de una noche en una tienda de campaña en mitad de la nada o en hoteles de dudosa higiene, comiendo instant noodles hasta que te salen por las orejas y un largo etcétera de incomodidades, no os parece precisamente la mejor manera de disfrutar de la vida. Estupendo, no vamos a intentar convenceros. Está muy bien que seamos todos distintos y nos gusten actividades diferentes...


¿Qué nos lleva a hacer un viaje en bici? Se ha escrito tanto sobre este tipo de viajes (de verdad; hay montones de viajeros ciclistas por ahí) que ya poco se puede aportar sin que suene a disco rayado o a filosofía barata. La gente habla de la sensación de libertad que da pedalear por caminos perdidos, parando cuando quieres, escogiendo la ruta que quieres, dueño por tanto de tu tiempo y de tu ruta, sin sufrir la tiranía de los transportes y los horarios, a una velocidad humana, sin las prisas de los coches o las limitaciones de hacerlo a pie, de una manera sostenible y amistosa con el medio ambiente, cercana a la gente y bla bla bla.
La estrenamos en Islandia...

No sé, demasiado profundo para mí. Nuestra máxima es que, hagamos lo que hagamos, lo haremos mientras nos lo estemos pasando bien y nos apetezca seguir. No tenemos ningún objetivo de kilómetros que haya que recorrer, ni de días máximos o mínimos de viaje, ni de desniveles acumulados, ni de número de países o de continentes que haya que visitar, ni siquiera de modo de transporte. Ni récords, ni demostraciones de nada, ni altruismos o cosas complicadas, ni otro objetivo que, pura y simplemente, disfrutar. 

Así que lo más sencillo será decir que vamos porque nos apetece, ¿vale? :o)

Plan y ruta

Como siempre el mejor plan es..., no tener plan.

Tenemos, eso sí, una idea inicial de por dónde queremos ir, más o menos clara en un principio -puesto que es por Europa y por tanto razonablemente predecible-, para posteriormente irse difuminando por el cambio de continente, el paso del tiempo, las mil y una vicisitudes de la burocracia y sus ¡@%&#! visados y, en fin, mi patente incapacidad para pensar en el futuro más allá de una o dos semanas. 

Planificando...
Saldremos en mayo desde Donosti, cruzaremos Europa leeeeentamente haciendo zig-zag hasta fin de año, con la intención de pasar lo más crudo del invierno en Chipre, sur de Turquía o norte de África. Cuando veamos que el tiempo mejora, terminaremos de cruzar Turquía y nos adentraremos en Irán, que dará paso, siguiendo la ruta de la seda, a los "stans" de Asia Central. Aquí las cosas se complican, que conseguir visados para estos países es un rollo patatero y a saber por dónde tenemos que ir y cuánto tiempo podremos permanecer en cada país.

Si las cosas salen bien, entraríamos en China por Kashgar. En función del visado que obtengamos para el "Reino del Medio", de las ganas que tengamos, de la estación del año que sea, etc., podríamos dirigirnos a Tíbet (y después Nepal, India, Pakistán y de nuevo a China por la mítica carretera del Karakorum) o dirigirnos directamente hacia Mongolia..., o vete tú a saber. De una forma u otra, en algún momento llegaríamos a Corea del Sur, después Japón, nuevamente a China, después Sudeste asiático, Oceanía y, eventualmente, las Américas. Pero, en fin, a saber lo que puede pasar dentro de tanto tiempo y con tantos kilómetros en nuestras piernas... El viaje podría durar unos 3-5 años pero, nuevamente, ya veremos.

Como resumen de lo anteriormente dicho ahí va la ruta "mapeada"; ya avisamos de que cualquier parecido con la realidad será pura coincidencia...



De todas formas, buen plan, ¿no?

Equipamiento

No os vamos a aburrir con los mil detalles del equipamiento que llevamos. Ha sido una pelea entre, por un lado "lo único que realmente hace falta es ganas, se puede viajar con lo que sea" y, por otro lado "vamos a llevar buenos equipos para evitar más esfuerzo del necesario, preocupaciones y malos rollos, y así disfrutar del viaje a tope". En este punto, todo viajero que se precie dirá que ha llegado a un término medio, a un punto de equilibrio entre ambas posturas. Que es, como no podía ser de otra manera, a lo que nosotros hemos llegado :o).
Hugo eligiendo cubre-sillín en un mercado de Sudán las pasadas navidades

En fin, baste decir que llevamos dos buenas bicis alemanas, de acero, sólidas, con cambios tradicionales (gran debate y muchas dudas sobre si Rohloff sí o Rohloff no), ruedas de 28" (otro debate sobre si ruedas de 26" sí o no) y sin sofisticaciones ni cosas raras, de esas que en teoría no se rompen y, que si lo hacen, son relativamente sencillas de reparar en cualquier parte del mundo, incluso por mí (Bego, como ingeniera que es, lo tiene "to' dominao"). Bicis compradas a Bigarren Eskua en Pamplona.

Añadamos a esto la ropa de viaje, de bici y de monte. Llevamos cosas de monte, incluyendo un par de mochilas ligeras, porque de vez en cuando dejaremos aparcadas las bicis y haremos algún trek. Nuevamente otra pelea entre, por un lado, ir con buen equipo, técnico, ligero, moderno, polivalente y, por otro, que cuando lleguemos a un pueblo perdido de Asia Central no parezcamos un par de alienígenas recién llegados de Alfa Centauri. Di que yo paso desapercibido en cualquier lado y me "fundo" con los lugareños, pero mejor no forzar la cosa.
¡Yummy!

Sobre la ropa, aspecto crucial, absolutamente crítico, brújula de nuestras decisiones y que marcará la diferencia entre el éxito o el fracaso de esta aventura: que Bego, cuyo termostato aparentemente dejó de funcionar correctamente en algún país africano, no pase frío.

Además de todo lo anterior, cargaremos con material de acampada y de cocina (¡tiembla, Arzak!), herramientas y repuestos para las bicis (y repuestos para nosotros, en forma de botiquín), viandas, algo de electrónica (cámara de fotos, ereaders, tablet, ordenador, gps..., y un cargador enchufado a la dinamo de la bici para cargar de energía todo lo anterior) y poco más. Todo cabe en unas alforjas un tanto pesadas pero supuestamente impermeables, que mantendrán todo seco y protegido; si no de los amigos de lo ajeno, por lo menos sí de los elementos.

Esperemos que todo lo que llevamos no pese demasiado y se deje transportar... Ganas, no nos faltarán.

Un abrazo y ya os lo iremos contando.

23 comentarios :

  1. suena bien, muuuy bien. me gusta como escribes, hermano.

    ResponderEliminar
  2. Como me alegra de que os lancéis de nuevo a la carretera y espero que nos vayáis contando vuestras aventuras. El plan (PLANAZO) es excepcional y me parece admirable que os hayáis animado.

    Lamentablemente mi relación con las bicis no es demasiado buena y lo de hacer tantisimos kilómetros sobre dos ruedas no creo que fuera realizable así que si algún día me embarco en un proyecto de este tipo me da que tendrá que ser por otros medios. Hasta que llegue ese día iré tomando apuntes :)
    Buen viaje !!!!

    ResponderEliminar
  3. Y ahora con quién me voy al monte?

    ResponderEliminar
  4. Espectacular ver la ruta sobre el mapa, aunque ya la conociéramos. Tendremos que ir planificando los encuentros con bastante antelación. Tengo una mala noticia que espero no te suma en la más profunda desazón: los millones de seguidores chinos que sabes estaban a la espera de tu nuevo blog, no van a poder acceder al mismo facilmente. Es curioso (y muy significativo) que sea preciso una VPN en este país para poder acceder a un blog de un viaje en bicicleta por el mundo. Será que puede generar el deseo de tener la libertad de decidir tu propio camino en cada momento. Hablamos antes de que te vayas, criatura. Iñigo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Sobrevivirá el régimen chino a la inminente revolución que se va a montar cuando la población china sepa lo que se les niega?

      Eliminar
  5. Mucho ánimo Hugo y Bego. Os seguiremos en vuestras peripecias!!

    ResponderEliminar
  6. Por fin os vais, "pesaos"! Os seguire con inusitado interes y no menos sana envidia. Ante todo, mucha salud y suerte con las pequeñas incidencias (averias, burocracias,...); y eso, disfrutad mucho y volved! (no he dicho pronto). IRZ.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si preparas cenas como la del otro día, volveremos antes de lo que te imaginas...

      Eliminar
  7. I wish I had the guts to be like you! Vamos, que me reconcome la "envidia". Me encantaría leer un resumen de tu periplo cuando acabó nuestra etapa británica. Y en cuanto tenga tiempo me leo lo de África. Que vaya todo genial, y aquí tenéis una seguidora a partir de ahora. Disfrutad de la vida, por vosotros y por los demás.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Amaya! Qué bueno leerte aquí. No sé si lograremos disfrutar tanto como en aquellos años de nuestra etapa británica, pero lo intentaremos seguro!! Tú sigue mandando solecito de ahí abajo, que empezamos hacia el norte! ;)

      Eliminar
  8. Hola
    soy Marta (amiga de Judith, estuve en vuestra casa el sabado) , os mando un link de una masilla que igual os vendria bien llevar de viaje, el lema es "the world needs fixing" y vale para arreglar todo http://sugru.com/story. Buen viaje, os seguiré por aquí

    ResponderEliminar
  9. Bego,
    Soy Eduardo Jusué (Pitu) de Marianistas.
    Nos ha pasado Alberto Clemente el link de vuestro Blog.
    He intentado reconocerte con las fotos pero no he podido... No es que hayas cambiado o no, es que no me acuerdo de quién eres.
    Me parece una pasada el reto que tenéis por delante.
    Os deseo una aventura sin grandes contratiempos.
    Os seguiré.
    Suerte!!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Alberto nos engaña, no recuerdo ningún "Pitu" en mi clase... ;) Gracias de cualquier manera!

      Eliminar
  10. Hola Bego!

    Soy Jota (de Marianistas/Ingenieros)
    Te había perdido la pista hace 15-20años, pero Alberto Clemente ha recuperado esta parte de la red social perdida

    Uhauuu! que viaje. Ánimo y cuidaros.

    A partir de ahora también os sigo. Un abrazo

    ResponderEliminar
  11. Hola Begoña: qué envidia de viaje y, sobre todo, de espíritu!! Enhorabuena y buen viaje! Cuidaos!!

    ResponderEliminar
  12. Queridos par de dos: no sé en qué lugar estaréis cuando leáis mi mensaje, pero me temo que tenéis que volver a la base (donosti) porque se me olvidó daros un buen chorizo y un mejor jamón de Salamanca, así como un insuperable lomo. Decidme por favor si retornáis, si no daré buena cuenta de todo ello. Enfin, os deseo lo mejor en vuestra increíble aventura y un beso para Bego, que al final no pude despedirme.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Jajaja, como se dice por ahí, ! Te has caído con todo el equipo! Hemos tenido que retrasar la salida hasta el 2 de junio y hemos aprovechado estos días para ir a Picos de Europa, Somiedo, los Ancares. Pero pronto volvemos a Donosti, y estaremos encantados de recibir ese chorizo, jamón y lomo con los que tan generosamente nos quieres obsequiar... :D

      Eliminar
  13. Glupsss, No me lo puedo creer jeje

    ResponderEliminar
  14. Muchos animos para vuestra nueva aventura! Que envidia sana me dais.. Y encima en bici! Que gozada! Os seguiré en el blog y quien sabe si algún día coincidimos por esos mundos...un abrazo amigos!

    ResponderEliminar
  15. Que grandes que sois y mucha envidia!! Un placer haber compartido con vosotros una pizquita de esa pedazo de aventura que os estáis marcando. Ánimo con esos puertos de montaña vietnamitas! Rampas duras pero paisaje maravilloso! Por cierto somos Aitana y Jon (el chico de la camiseta del Atletico :$) Os pasamos nuestro Instagram así podemos entrar en contacto con vosotros para que nos mandéis las fotos y por si nos surgen alguna duda "aitanahis" y "menatxo". Igual para la próxima excursión que nos hagamos seguimos vuestro ejemplo. Bersarkada handi bat!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No te creas, algo de envidia también nos disteis con las motos entre estas montañas, que algunas de las cuestas se las traen. A ver si nos volvemos a encontrar por alguna de esas carreteras del Mundo, que parece grande cuando se recorre en bici, pero después es muy pequeño.
      Ah, y seguro que la camiseta era del At Madrid...
      Abrazo y suerte

      Eliminar